El silencio, a menudo es visto como un déficit de atención o una falta de comunicación, sin embargo, bien utilizado, puede desempeñar un papel fundamental en el desarrollo de la asertividad.
El silencio forma parte de la comunicación
En la comunicación asertiva, no se trata solo de lo que decimos, sino también de lo que decidimos no decir. Los silencios nos ayudan a:
- Mantener la calma: El silencio nos ayuda a concentrarnos en respirar despacio, algo fundamental en momentos complicados.
- Ordenar pensamientos: Relacionado con el punto anterior, el silencio nos sirve para autorregular las emociones, solo así podemos obtener claridad y orden en nuestros pensamientos.
- Rebajar el tono: Unos breves instantes de silencio ayudan a rebajar nuestro tono antes de hablar, algo que nos ayudará en caso de una conversación difícil.
- Responder si, reaccionar no: Con los pensamientos ordenados y en un tono moderado, seremos capaces de responder con atención plena, en lugar de reaccionar a una situación crítica.
¿Cómo respondemos con silencio?
- Situaciones fuera de lugar: Cuando alguien traspasa un límite o hace una petición que está fuera de lugar el silencio es una herramienta tan poderosa, que incluso no responder y sostener el silencio, puede ser más que suficiente para que la otra persona sea consciente de su falta de empatía y/o del abuso en el que ha incurrido, sin tener que dar más explicaciones, o incluso ahorrarnos tener que decir “no”.
- Nada bueno que decir: Tal vez se esté dando la situación en las que no encuentras algo bueno que decir y no pasa nada, no siempre vamos a tener la frase adecuada o la respuesta correcta, es más, todo lo que se nos pasa por la cabeza lo único que haría es emporar la situación, en ese caso el menor daño que puedes hacer es estar en silencio.
- ¿Hay que responder?: Estamos tan acostumbrados a interactuar que se nos olvida que en multitud de ocasiones lo único que se necesita de nuestra parte en una conversación es solamente nuestra presencia, es decir que en lugar de interrumpir o hablar sin cesar, el silencio nos permite escuchar activamente a la otra persona.
- Escucha activa: La asertividad no solo implica expresar nuestras opiniones de manera clara y directa, sino también escuchar a los demás de manera atenta. El silencio durante las pausas de la conversación es una señal de que valoramos lo que la otra persona está diciendo, que le permitimos el espacio para pensar en lo siguiente que quiere comunicar.
- ¿Realmente había una pregunta?: Desde el silencio, podemos procurar un desahogo en la otra persona, tenemos una tendencia innata a consolar, calmar y dar consejos sin parar, pero, pregúntate si en el discurso de la otra persona realmente había una pregunta a la que tu hubieras de responder o de nuevo tu presencia era más que suficiente.
El silencio asertivo no es ni evasión ni pasividad ni ignorancia, no se trata de callar por miedo o para evitar confrontaciones, sino de usar el silencio como una herramienta consciente para mejorar nuestra comunicación y mantener el equilibrio emocional. La asertividad se trata de ser claros, firmes y respetuosos, y en multitud de ocasiones el silencio es la mejor manera de lograrlo.
Hay gente que maneja fenomenal los silencios en las conversaciones de forma innata, pero en general requieren de un entrenamiento consciente, mi consejo, cuando estás hablando con una persona que está pasando por una situación difícil y te la está narrando, antes de tratar de resolver su situación con mil y un consejos, asegúrate que te lo han pedido o que había alguna pregunta directa a la que hubieras de responder.
En resumen:
El silencio asertivo es una herramienta poderosa que permite tomar el control de nuestras respuestas, establecer límites, escuchar mejor a los demás y mantener el equilibrio emocional. Practicar el silencio con conciencia puede crear una gran diferencia en la calidad de nuestras interacciones y en la forma en que nos comunicamos.
Próximamente: Ejemplos de conversaciones complicadas asertivas.
Pasemos de la teoría a la práctica con ejemplos de conversaciones que pueden resultar complicadas y como resolverlas de forma asertiva. ¡Te espero!